jueves, 10 de noviembre de 2011

VÉRONIQUE TWIN



FOTOS: ALASDAIR MCLELLAN


La idea de la exposición al teatral transformo el terreno e hizo que Sam Louwyck efectuara una extraordinaria coreografía  bajo la oscura sensación de que David Lynch  estaba sentando en una de las butacas. 

 Ahí Laura Palmer no era una aparición. Estaba presente y los chicos que venían hacia ella usaban chamarras de leñador a cuadros  con forro de piel de oveja . 

Gabardinas espeluznantes algunas de  cortes bruscos.Trajes marrones, súper sutiles o jerseys  con aplicaciones,  algodón lustroso, piel sintética y abrigos de lona con forro rojo Sheppard. Botas severas como calzado. Véronique Branquinho intuye que el mundo del subconsiente proporciona selectas formas.



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